Très bien , très bon séjour.

Olivier a résidé à Chalet Angel en décembre 2021 (avis publié sur Cocoonr)

We traveled from Barcelona to the south of France. Aurelia received us. She was very warm and friendly, with a smile on her face, and she reply to our questions in time every time. The wooden house provided by Aurelia is very beautiful and well-equipped. We really enjoy the gorgeous view,that let me feel I stayed in the postcard, we spent a happy holiday here and leaves a good memory, we will choose to come back here again, because it is so amazing! Just the words can not described how much I love here, you have to come and see it.

Lch a résidé à Chalet Angel en décembre 2021 (avis publié sur Airbnb)

Top

🙂 Très bon accueil
Chalet très confortable
Très bonnes ondes !!

Christophe a résidé à Chalet Angel en février 2024 (avis publié sur Booking.com)

Chalet confortable et très bien équipé - magnifique vue sur le lac - endroit calme et paisible-

Marie José a résidé à Chalet Angel en février 2022 (avis publié sur Airbnb)

Mírame y no me toques

Lo que tenía que ser una experiencia inolvidable en familia se acabó convirtiendo en la peor de nuestras pesadillas. Habíamos visto las fotos de la casa y nos parecía idílica; toda de madera, con chimenea, terraza con vistas al lago, sauna, jacuzzi,… La casa ideal para complementar nuestras jornadas de esquí. No obstante, esa imagen idílica se fue transformando con el paso del tiempo.

Nada más llegar el primer chasco, el trato con Aurelia. Una visita rápida por la casa con breves explicaciones sobre el funcionamiento de la misma, nada sobre el WiFi, sobre el funcionamiento del equipo de música, sobre los principales electrodomésticos,... Lo único para lo que se tomó un poco de tiempo fue para destacar todo lo que deberíamos pagar si pisábamos las alfombras, si se rompían los elementos decorativos que se habían colocado estratégicamente al borde de cada escalón, si no dejábamos la casa tal cual se esperaba,… Dicho esto nos comentó que la sauna y el jacuzzi, que eran el principal reclamo de la casa junto a las vistas al lago, no funcionaban y que si queríamos nos daba entradas para el balneario del pueblo. Antes de despedirse nos advirtió: “Cualquier cosa que necesiten no me molesten más allá de las ocho de la tarde, tengo tres hijos y un marido al que atender”.

No habían pasado ni cinco minutos en la casa que mi pareja ya me estaba sacando la primera astilla que se me había clavado entre la carne del dedo y la uña cual tortura de china. Horas más tarde mi hermano sufría el mismo percance a la vez que se quedaba encerrado en su habitación con la manecilla de la puerta en la mano. No se puede alquilar una casa de madera sin un mínimo mantenimiento como puede ser el lijado de la misma.

Tras conseguir sacarme la astilla decidimos salir a la terraza para disfrutar de las vistas. Estuvimos unos 15 minutos hasta que dimos con el mecanismo de cómo abrir la puerta. Sinceramente parecía una prueba de Escape Room: abates la parte de arriba de la puerta, luego cede la parte de abajo y finalmente se convierte en corredera para poder salir al exterior. Una obra de alta ingeniería, nada práctica en una casa de alquiler y más aún cuando nadie te ha explicado su complejo funcionamiento. Tan poco práctica que el último día la puerta se quedó trabada quedando abierta sin forma humana de cerrarla ni por nuestra parte ni por parte de la agencia que en ningún momento se preocupó de enviar a alguien que la reparara. Si a esto le sumamos que ese último día se estropeó la caldera y no iba la calefacción nos encontramos con: temporal de nieve afuera, una casa sin calefacción y una puerta que da a la estancia principal que no se puede cerrar.

Inicialmente la casa se había quedado sin calefacción y agua caliente por la falta de previsión de la agencia, pues el tanque de gasóleo que tenía que calentar el agua se había quedado seco a pesar de tener capacidad para abastecer la casa durante 2 meses. Tras el llenado del depósito pudimos gozar de unas horas de agua caliente, pero eso fue todo, la calefacción jamás volvió y a la mañana siguiente seguíamos sin calefacción.

El día de la salida esperamos durante 45 minutos la llegada de Aurelia, verificamos que la casa cumplía con todos los requisitos (casa limpia, chimenea limpia, ropa de cama recogida, lavavajillas vacío,…) y nos fuimos.

Horas más tarde recibimos un correo donde al principio creíamos nos iban a indemnizar tal y como nos había sugerido en una conversación telefónica el verdadero propietario de la casa. Nada más lejos de la realidad, COCOONR / BOOK&PAY nos reclamaba dinero porque la puerta de la terraza se había roto, porque la manecilla también se había roto, porque la caldera se había estropeado y porque la casa necesitaba una limpieza adicional.

A estas alturas no sabemos como va acabar todo este tema, pues todavía no ha concluido la mediación de Airbnb, pero nosotros nos sentimos totalmente engañados y maltratados por la agencia COCOONR / BOOK&PAY, o cuanto menos por su representante Aurelia. Desaconsejamos cualquier alquiler con ellos pues a día de hoy todavía esperamos una disculpa por su parte por el mal trago de la última noche, una solución al tema del jacuzzi y la sauna que no fuera un balneario público en tiempos de Covid, por no hablar del timo de la limpieza adicional cuando cumplimos estrictamente con lo solicitado e incluso esperamos a su aprobación antes de abandonar la casa.

Monica a résidé à Chalet Angel en janvier 2022 (avis publié sur Airbnb)